domingo, 30 de diciembre de 2012

2013. LLEGÓ LA HORA DE EMPRENDER

La falta de trabajo y de expectativas profesionales en los jóvenes españoles es una de las consecuencias más dramáticas y más graves de la crisis actual.

El del emprendimiento  es un asunto complejo; ya que nos interpela directamente a nuestra educación, a nuestras creencias, a nuestros valores, a nuestra cultura, a nuestra filosofía de vida y a la forma en que tenemos de pensar, trabajar, relacionarnos, competir, consumir o sobrevivir.

Lo que está claro  es que el emprendimiento, en su sentido más amplio, es una actitud y una forma de vida que cada vez adquiere más relevancia y protagonismo en la sociedad.

Emprendedor no es lo mismo que empresario. Es cierto que para ser empresario conviene tener ciertas características emprendedoras; pero no es lo mismo y conviene señalarlo.

 Un empresario es una persona que ve oportunidades de negocio, las desarrolla y busca con ellas generar un beneficio económico o de rentabilidad.

La persona emprendedora se caracteriza por estar siempre buscando nuevos retos, nuevas inquietudes y nuevos objetivos. Además, es una persona que trabaja para desarrollar esos proyectos y para alcanzar esos objetivos. Se interesa pues, constantemente, por su formación y su mejora continua, tanto personal como profesional.

Un emprendedor no necesariamente tiene que trabajar por su cuenta o crear una empresa. La persona que emprende puede hacerlo desde un trabajo por cuenta ajena, si las condiciones y el contexto laboral se lo permiten y se quiere aprovechar esa riqueza personal; o también desde el desempleo. En este último caso, la persona que no tiene trabajo puede desarrollar en mayor o menor medida esta actitud emprendedora e iniciar un recorrido para alcanzar sus metas profesionales.

 Los objetivos del emprendedor pueden también ser ajenos a la actividad profesional. Cuando una persona emprende, lo que hace es, de algún modo, darle forma a una idea, a un proyecto. Y esta idea puede estar relacionada en mayor o menor medida con lo laboral.

 Si de algo está sirviendo la crisis, es para tener la certeza de que, se trabaje donde se trabaje, nunca nada es para siempre. Ningún trabajo, ni ningún proyecto son para siempre; nos guste admitirlo o no. Las reglas del juego han cambiado radicalmente. Vivimos en una sociedad globalizada, en constante proceso de cambio, evolución y transformación; y esto cada vez tiene más repercusión en los sistemas de trabajo.

 Sergio Fernández, en su libro Vivir sin Miedos, se atreve incluso a hablar del trabajo por cuenta ajena como de una temeridad; en el sentido de que él considera que sería como depender de un solo cliente. Si te falla ese cliente… ¿qué pasaría? 

Lo que sí está claro es que el desarrollo de la actitud emprendedora debe pasar por un análisis personal profundo, por un proceso de autoconocimiento y de desarrollo importante que nos permita descubrir realmente a qué hemos venido a este mundo. Cuál es nuestra mejor aportación a la sociedad. Qué es lo que realmente se nos da mejor hacer. Qué nos hace diferentes, únicos, exclusivos… Por qué y para qué acudirían a nosotros antes que a otra persona. Cuál es nuestra marca o sello personal. Este recorrido nos puede llevar mucho tiempo, pero es fundamental hacerlo ya que, en la mayoría de los casos, el objetivo no está en la meta, sino en el propio camino… en el desarrollo.

A lo largo de estos diez últimos años de trabajo como orientadora he podido comprobar que este proceso de autodescubrimiento es clave para el desarrollo del emprendimiento y de la empleabilidad en general. No importa cuánto tiempo lleve descubrirlo… hay que indagar e investigar hasta la saciedad. Es un trabajo que en el mejor de los casos habría que desarrollar desde la más temprana infancia, acompañando al niño en sus procesos vitales y personales, y favoreciéndole al máximo las posibilidades de exploración, imaginación, experimentación y creatividad.

Hasta ahora, el sistema educativo y las familias en general, no han contribuido suficientemente en este sentido. No obstante, nunca es tarde para iniciar un proceso de orientación y acompañamiento a los jóvenes en la definición de sus objetivos personales y profesionales.

En mi opinión, las personas que trabajan en proyectos de orientación educativa y profesional tienen mucho que aportar en este sentido, ya que actúan como referentes claves en los itinerarios de inserción. No obstante, para desempeñar esta labor de forma óptima, los primeros que deberían atravesar por ese proceso de desarrollo y mejora personal, serían los propios orientadores. Si no se hace, se corre el riesgo de proyectar las propias inseguridades, miedos, carencias y preocupaciones en las personas con las que trabaja; y esto, para el desarrollo del emprendimiento, es muy negativo. 

Algunas de las competencias que considero claves en para desarrollaractitud emprendedora serían las siguientes :
  -          Autoconfianza. Creencia y confianza en las propias capacidades para llevar a cabo tareas en situaciones difíciles. Seguridad en que uno es capaz de cumplir con éxito y con responsabilidad el trabajo.
-          Creatividad e Innovación. Imaginación y originalidad en el ejercicio del trabajo. Capacidad y esfuerzo por realizar cosas nuevas que mejoren los resultados y la calidad de los productos o servicios.
-          Trabajo en Equipo. Capacidad para colaborar y cooperar con otros. Formar parte de un grupo, trabajar en red y desarrollar la solidaridad profesional en contraposición a la ya convencional y desfasada competitividad pura y dura.
-          Autonomía. Competencia para trabajar de forma autónoma e independiente; sin necesidad de una constante supervisión.
-          Impacto e Influencia. Capacidad de generar un impacto o repercusión en los demás… de convencerles, entusiasmarles, animarles e impulsarles con el fin de desarrollar tareas profesionales.
-          Liderazgo Personal. Más que el liderazgo formal asociado a posiciones de cierta autoridad o estatus laboral; el liderazgo personal tiene más que ver con el deseo de guiar a los demás en la consecución de ciertos objetivos. Muy vinculado al atractivo personal, a la asertividad y a la capacidad de comunicación.
-          Comprensión Interpersonal. Capacidad para escuchar, comprender y responder a los demás sin que éstos lo hayan expresado. Supone adaptar la respuesta en función de los sentimientos, preocupaciones o pensamientos de otros.
-          Iniciativa. Capacidad para emprender acciones, mejorar resultados o crear oportunidades. Hacer más de lo que se requiere o se espera en el puesto o hacer cosas que nadie ha pedido, para mejorar o incrementar los resultados, evitar problemas o encontrar nuevas oportunidades. Se trata de una tendencia a actuar de forma proactiva y no sólo limitarse a pensar en lo que hay que hacer en el futuro aplazándolo siempre.
-          Afán de Aprendizaje y Mejora Personal. Motivación intrínseca por la superación  y el perfeccionamiento tanto a nivel personal como a nivel profesional. Interés constante por la formación continua y el desarrollo del talento y de los nuevos proyectos.
-          Resiliencia. Capacidad de afrontar la adversidad y salir fortalecido de esas situaciones, alcanzando incluso un estado de excelencia personal y profesional. Es el convencimiento que tiene el individuo en superar los obstáculos de manera exitosa sin pensar en la derrota a pesar de que los resultados estén en contra. Al final surge un comportamiento ejemplar a destacar en situaciones de incertidumbre con resultados altamente positivos. Podría definirse también como la entereza más allá de la resistencia.

 
Para finalizar, mencionar a Ana María Matute en una cita que bien se podría aplicar al ámbito del emprendimiento. El día en que la novelista obtuvo el Premio Cervantes 2010 con el que se le reconocía su esfuerzo y dedicación al oficio literario, ofreció un pequeño pero brillante discurso en el que finalizó afirmando lo siguiente:

 “El que no inventa no vive”

… Yo añadiría además que… en estos tiempos, “el que no inventa no sobrevive”.


 
Zara Baldallo. Psicóloga especializada en Desarrollo Personal.

 

 

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario