miércoles, 22 de enero de 2014


¿Creatividad?... ¿Qué es eso? 
 

            La creatividad, el pensamiento original, la imaginación constructiva, el pensamiento divergente o el pensamiento creativo, consiste en la generación de nuevas ideas o conceptos conocidos que puedan generar soluciones originales.
 
             El pensamiento original es un proceso mental que nace de la imaginación. La cualidad de la creatividad, puede ser valorada en función de los resultados finales obtenidos tras su aplicación práctica.
            
             Cuando hablamos de las diferencias entre personas creativas y no creativas, observamos que la creatividad no está tan relacionada con el nivel de inteligencia, tal y como tradicionalmente se había pensado. Las diferencias más significativas, parecen estar más relacionadas con los rasgos de la personalidad.
 
            Aunque indudablemente existe mucha variabilidad, la personalidad creativa está muy frecuentemente relacionada con niveles medio-altos de introversión  de inteligencia abstracta. Suelen ser personas que necesitan períodos grandes de soledad que les permitan ser más intuitivos.
 
             A menudo, las personas creativas muestran serias dificultades para relacionarse socialmente y evitan estos contactos. Incluso, a veces, estas personas tienden a concluir que los demás son poco inteligentes y eso les aleja de establecer relaciones personales en un plano de igualdad. Suelen también estar más alejadas de prejuicios y convencionalismos, y sienten poco respeto por las tradiciones, la autoridad, las normas y las reglas ya establecidas.
 
            Un dato curioso, es que los hombres creativos suelen obtener valores altos en los rasgos de “feminidad”, lo cual indica que suelen ser personas con mayor sensibilidad que la media masculina, son más conscientes de sí mismos y están más abiertos a la emoción y a la intuición. También suelen mostrar mayor preferencia por la complejidad de las cosas.

             Hay autores que hablan de dos grupos de personalidades creativas: la personalidad creativa científica y la personalidad creativa artística. La primera de ellas, está formada por personas que ponen al servicio de la vida práctica su ingenio y capacidad creativa; los creativos artísticos suelen ser personas más inconformistas en lo académico, en lo laboral y en la vida en general.

Otros rasgos de personalidad que están asociados a la creatividad, son la valentía personal y profesional, la confianza en uno mismo, la alta capacidad de asociación, la intuición, la imaginación, la capacidad crítica, la curiosidad intelectual, la libertad, el entusiasmo, la flexibilidad y la apertura mental.
 
Ken Robinson es una de las personalidades hoy más destacadas en cuanto al estudio de la creatividad se refiere. En su libro, El Elemento, afirma que lo que realmente diferencia a una persona creativa de otra que no lo es, es la escasez o ausencia de miedo al fracaso. Porque todo niño cree ciegamente en su propio talento, y la razón es que no tiene miedo a equivocarse. Hasta que el sistema le va enseñando, poco a poco, que el error existe y que hay que avergonzarse de él. Según este autor, la escuela debería ayudar a los niños a encontrar su elemento (aquella zona en la que confluye lo que mejor se nos da hacer, con lo que más nos gusta), y no limitarse a encauzarlos hacia el mismo tipo de talento.
 
 Según Robinson, el sistema educativo actual fue concebido para satisfacer las necesidades de la industrialización (talento sólo para ser mano de obra disciplinada y obediente, con preparación técnica jerarquizada en diferentes grados y funcionarios para servir al estado moderno). Pero la industrialización ya no existe. Estamos en otro modo de producción con otros requerimientos y otras jerarquías. Ya no necesitamos millones de obreros y técnicos con idénticas aptitudes. Aún así, nuestro sistema los sigue formando; y ese podría ser el motivo principal del aumento del desempleo.
 
 Robinson asegura, además, que la creatividad se puede enseñar y transmitir en el seno de la familia y en la escuela. Todos tenemos algún don especial creativo, pero necesitamos los medios y la estimulación adecuada para desarrollarlos.
 
           Atreverse a salir de las zonas de confort es el primer paso hacia la creatividad. Salir de la rutina y de lo cómodo es fundamental para intensificar las conexiones cognitivas y emocionales de la creatividad.


Zara Baldallo. Psicóloga especializada en Desarrollo Personal.